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Santiago Industria Circular

INC-4: El ejemplar caso de la delegación chilena

May 23, 2024

  • Por Magdalena Balcells, gerente general de la Asociación Gremial de Industriales del Plástico (Asipla).

El pasado 30 de abril en Ottawa, Canadá, y tras lograr importantes acuerdos, concluyó el cuarto Comité Intergubernamental de Negociación (INC-4) liderado por la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, instancia en la cual se está desarrollando el Tratado Global contra la Contaminación por Plásticos incluido el medio marino, un instrumento internacional jurídicamente vinculante.

Esta fue la segunda participación de ASIPLA como parte de la delegación chilena -a cargo de los ministerios de Relaciones Exteriores y Medio Ambiente- y vale la pena detenerse en las particularidades de su conformación y el gran valor que ésta tiene. Pues, además de ASIPLA, el sector privado estuvo representado por AB Chile y participaron también, al igual que en ocasiones anteriores, representantes de la academia y de la sociedad civil, logrando así un alcance integral de visiones y posturas respecto a los temas que se discuten en los Comités, y un fiel reflejo de la composición de nuestra sociedad, donde todos los actores tendremos un rol para implementar exitosamente lo que establezca este importante Tratado.

Destacamos esta excepcional conformación de la delegación y celebramos que el sector público y, en particular, los representantes y negociadores de los ministerios de Relaciones Exteriores y de Medio Ambiente, le den cabida y valor a los diversos aportes y representatividad de los distintos ámbitos de la sociedad, que, dicho sea de paso, no es una composición habitual entre las más de 170 delegaciones de los Estados miembros que participan en estas negociaciones. 

Sabemos por experiencia que los problemas ambientales son complejos y multidimensionales, por lo que requieren de soluciones sofisticadas e integrales. Pero implementarlas de manera exitosa es posible solamente con la colaboración de los distintos actores y su voluntad de avanzar hacia un mismo objetivo. 

A diferencia de los países productores de petróleo, en Chile parte relevante del conocimiento técnico del sector de los plásticos se desarrolla directamente en la industria, de la mano de la academia. Es por esto que valoramos especialmente que nuestras autoridades negociadoras rescaten esa mirada holística e integradora y nos permitan -como industria del plástico en Chile- aportar desde nuestro compromiso experto, siempre con un ánimo constructivo y con el fin de alcanzar acuerdos que, de manera realista e implementable, puedan efectivamente, poner fin al problema de la contaminación por residuos plásticos a nivel global. 

El INC-5 -en teoría la última sesión de negociaciones- tendrá lugar entre el 25 de noviembre y el 1 de diciembre de 2024 en Busan, Corea del Sur y, si bien en Ottawa (INC-4) se avanzó en muchos temas relevantes, aún queda mucho trabajo por hacer para reducir las brechas de entendimiento entre los Estados y consensuar las diferencias sobre el alcance y el objetivo del futuro instrumento jurídico.

Esto quedó en evidencia cuando durante las reuniones para debatir los elementos técnicos del texto surgieron diferentes opiniones en aspectos como el grado de exigencia de las medidas -con prohibiciones directas como “no permitir” y “eliminar” u otras como “reducir gradualmente”, “regular” y “restringir los productos”-, y si las medidas abordarán algunos o todos los aspectos de fabricación, uso, producción, venta, distribución e importación o exportación, así como la discusión sobre plásticos problemáticos y evitables, el diseño, la composición y rendimiento de los productos.

Dada la complejidad de estos temas, entre los grandes acuerdos alcanzados destaca el establecimiento de dos grupos Ad-Hoc de Expertos de Composición Abierta (AHOEEG) que serán convocados a una reunión intersesional- fecha y lugar por determinar- antes de la INC-5. Estos grupos serán conformados por Estados miembro y especialistas, y se centrarán en: a) el desarrollo de un mecanismo para financiar la implementación del Tratado y b) realizar un análisis con enfoques tanto basados en criterios como enfoques no basados en criterios, sobre los productos plásticos problemáticos o evitables y sustancias químicas de preocupación, habitualmente utilizadas en la producción de productos plásticos. También se busca poner foco en el diseño de productos para promover la reutilización, la reciclabilidad y la consecuente circularidad de los plásticos. 

Desde ASIPLA esperamos seguir aportando técnicamente en los próximos hitos de la construcción de este importante Tratado y que el ejemplo de la delegación chilena pueda ser replicado cada vez más por nuevos Estados miembros, que vean en la colaboración el camino para darle un mejor futuro a las nuevas generaciones.

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