Sólo en 2022 reciclaron más de 4 mil toneladas de plástico PET proveniente de botellas de bebida, agua y jugos para transformarlas en materia prima que da vida a nuevos envases.
La contaminación producida por el excesivo consumo de plásticos en uno de los grandes problemas que afectan al planeta. De acuerdo con un estudio de la OCDE, sólo en un año se generaron más de 350 millones de toneladas de residuos de este material y alrededor de dos tercios provenía de plásticos con una vida útil menor a cinco años. Si bien el 15% del plástico se recoge para ser reciclado, finalmente el 40% no pasa por el proceso y termina siendo eliminado como basura. ¿El resultado? El reciclado efectivo alcanza sólo el 9%. En ese escenario, la Organización ha planteado que es urgente crear un mercado de plásticos reciclados que funcione de manera óptima, fijar objetivos de contenido reciclado e invertir en tecnologías que puedan hacer ese producto más competitivo y rentable.
Impulsar la correcta gestión de residuos y su revalorización es justamente el propósito de Integrity, empresa nacional que sólo en 2022 recicló más de 4 mil toneladas de plástico PET proveniente de botellas de bebida, agua y jugos para transformarlas en materia prima que da vida a nuevos envases que también se incorporan en el círculo del reciclaje. “Transformamos residuos cuyo origen es el trabajo de recicladores pequeños y medianos y también de grandes empresas, con el fin de generar valor agregado a productos considerados como desechos. Si bien aún queda mucho por hacer, cada vez hay más conciencia en torno al reto que enfrentamos como sociedad. De hecho, en 2022 aumentamos en un 24% la recepción de PET reciclado en nuestras instalaciones”, aseguró Gabriel Fonzo, CEO de Integrity.
Sus envases son fabricados con plástico reciclado 100% reciclables, son aptos para fruta fresca de exportación, productos de pastelería y alimentos en general e implican un 30% menos de emisiones de CO2. Además de la reducción de la contaminación por plástico, su operación es un aporte adicional a la sustentabilidad. La planta funciona totalmente con energía sustentable, cuyo origen son fuentes renovables no convencionales, y cuenta con certificación de calidad y seguridad en la producción de norma BRC Packaging (British Retail Consortium).
Respecto a los hitos para este año, el principal será “la construcción de una nueva Planta de Reciclaje de Plástico que nos permitirá en su máxima capacidad producir hasta seis veces lo que hace la actual. Con esto buscamos mejorar nuestra materia prima y lograr abastecer la totalidad de la fabricación de nuestros envases para dejar de importar PET reciclado. Estamos trabajando para mejorar los procesos existentes y ser aún más sostenibles en nuestro funcionamiento”.