por Daniel Fajardo | Jun 17, 2025 | En los espacios públicos
- El evento, apoyado por Corfo y organizado por Innova Global, culminará con una pasarela protagonizada por 12 duplas de diseñadores y artesanos, quienes presentarán creaciones de alta costura elaboradas con materiales reciclados.
Moda, reciclaje y tradición artesanal se unen esta semana en Santiago para transformar la industria creativa desde la economía circular y el reciclaje. El Congreso Internacional de Moda y Artesanía Circular y Sostenible, reúne a referentes globales y locales donde el foco central es la innovación y la sostenibilidad.
La iniciativa, apoyada por Corfo y organizada por Innova Global, se realiza en el Auditorio de la Universidad Andrés Bello, Campus Bellavista, y culminará este jueves 19 de junio en Estación Mapocho con una pasarela que presentará el trabajo de 12 equipos de diseñadores y artesanos que vienen trabajando desde hace semanas en prendas de alta costura confeccionadas con material reciclado.
Esta versión de RFD llega a Santiago tras el exitoso evento realizado en Tarapacá en mayo de 2024, donde más de 2.500 personas participaron en las jornadas desarrolladas en ZOFRI y la Oficina Salitrera de Humberstone. En esa oportunidad, las colecciones presentadas se elaboraron con ropa recogida de los vertederos del desierto de Atacama. Para 2026, el proyecto ya tiene su próxima parada en la ciudad de Valdivia, gracias a una iniciativa apoyada por Corfo Fomento Los Ríos.
El equipo ganador tendrá la oportunidad de desarrollar una colección cápsula exclusiva para la marca PIMPS, la cual será distribuida en todo el país, exhibida en sus tiendas físicas y difundida en sus canales de difusión.
El congreso cuenta con la participación de figuras destacadas como Agatha Ruiz de la Prada, diseñadora española reconocida por su enfoque artístico y sustentable; Jesús Reyes, periodista y experto en cultura y sostenibilidad; Juan Carlos Mesa, diseñador y director creativo de Maison Mesa de España.
La actividad busca impulsar la creación de nuevas alianzas entre diseñadores, artesanos, emprendedores y empresas locales, mediante procesos de mentoría, seminarios, espacios de networking y exhibiciones colaborativas.
por Daniel Fajardo | May 28, 2025 | En las startups
- Los postulantes deberán presentar proyectos que revaloricen estos subproductos a través de la tecnología, la creatividad y la sostenibilidad. La iniciativa es organizada por Viña Concha y Toro y HUBTEC.
“Ideas que brotan, residuos que transforman”. Ese es el lema de ReWine, una convocatoria de innovación abierta, especialmente enfocada a la industria vitivinícola, organizada por el Centro de Investigación e Innovación de la Viña Concha y Toro junto al centro de transferencia tecnológica HUBTEC.
La iniciativa busca soluciones que den un nuevo valor a los subproductos de la producción del vino, considerando que el sector genera más de 500.000 toneladas anuales de residuos orgánicos como orujos, escobajos, lías y lodos, ricos en compuestos bioactivos con un gran potencial para nuevas aplicaciones.
Las postulaciones estarán abiertas desde el 28 de mayo al 27 de junio de 2025, y se privilegiarán las propuestas que, aunque se encuentren en fases iniciales, tengan un alto potencial comercial y oportunidad de co-desarrollo con la empresa.
Los postulantes deberán presentar proyectos que revaloricen estos subproductos a través de la tecnología, la creatividad y la sostenibilidad. De esta forma, se espera dar forma a productos comercializables que puedan abrir otras áreas de negocio.
Los ganadores recibirán hasta $10 millones para el desarrollo de una prueba de concepto, mentorías especializadas a cargo de profesionales de Viña Concha y Toro y HUBTEC, acceso a materias primas e instalaciones de la empresa y oportunidades de co-desarrollo y escalamiento futuro.
por Daniel Fajardo | May 26, 2025 | En los espacios públicos
- En su primera colaboración, la foodtech y la organización ambiental compartirán información sobre la magnitud de este problema en el país y el mundo.
Santiago. 19 de mayo, 2025.-
WWF -la principal organización de conservación de la naturaleza a nivel global- y Cheaf -plataforma tecnológica que permite a supermercados, restaurantes y tiendas ofrecer sus excedentes- decidieron lanzar la campaña ‘Hasta la última miga’, la que pretende aunar esfuerzos para concientizar sobre las implicancias del desperdicio de alimentos en el país y los desafíos pendientes en la materia.
De este modo, durante las próximas semanas ambas organizaciones compartirán contenido informativo sobre el desperdicio de alimentos a través de sus redes sociales y la prensa, a la vez que presentarán soluciones y entregarán consejos para evitar este desperdicio en los hogares y los comercios.
Para hacerse una idea, a fines de 2024, la Universidad de Las Américas, publicó una investigación en la que reveló que cada año se desperdician 5,2 millones de toneladas de alimentos en Chile, y que un 68% de las frutas y verduras producidas en el país no llega a consumirse. Por otro lado, de acuerdo a datos del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), en el mundo cada año se desperdician más de 1.050 toneladas de alimentos.
por Daniel Fajardo | May 16, 2025 | Opinión
- Por Javier Peró, Fundador y Presidente del directorio de Kyklos
La ley REP fue impulsada con el objetivo de aumentar las tasas de reciclaje de envases, embalajes y otros materiales, estableciendo un mecanismo de financiamiento en base al principio de que los “productores”, es decir, los que ingresan los envases al mercado, tengan que pagar para que estos sean recolectados y reciclados.
Para administrar este financiamiento, se crearon los SIG (Sistemas Integrados de Gestión), con el objetivo de agrupar a los “productores”, calcular las cuotas según su volumen en el mercado y “organizar” el mercado de recuperación, segregación y valorización de los “envases y embalajes” (EyE)
La normativa reconoce 2 tipos de fuentes o categorías distintas de EyE. Domiciliarios y No Domiciliarios (o Industriales), entendiendo que el lugar de generación, acopio, volumen, tipo, entre otros factores; entre estas dos categorías era evidentemente muy diferente y por ende, se debían normar de formas distintas.
Para la categoría Domiciliarios, se establecieron reglas bien uniformes, con el objetivo de unificar los criterios de recolección y que la población pudiera aprender fácilmente la forma de segregar y la industria pudiera unificar también la forma de recolectar, segregar y valorizar.
Además de establecer reglas uniformes, la ley Rep fue ambiciosa en definir todos los procedimientos de licitación de los servicios, estándares de operación, planes de gestión, entre muchas otras materias. Sumado a esto, impuso normas para favorecer la creación de “esperablemente” un solo gran SIG (en la actualidad se formaron 2 principales para domiciliarios) que pudiera controlar en una sola mano el destino de todos los EyE domiciliarios y estableció que los “productores”, miembros de un SIG, no tuvieran alternativas en la forma en que pueden “recuperar” sus envases que están poniendo en el mercado más que la establecida por el SIG al que adhirieron.
Estas normativas bien rígidas puede que hagan sentido -aunque discutiblemente- cuando se piensa en que los sistemas de recolección “casa a casa” en cada comuna tenga que seguir un orden y lógica común (al igual que los servicios básicos de energía y agua por ejemplo) en que se recolecta desde la “acera”, que es un espacio público sin embargo, lo que no consideró la nueva ley, es que existe un subconjunto relevante de envases que no son ni industriales, ni domiciliarios del “casa a casa”, en donde ya existía una industria de recuperación que ha falta de fomentos regulatorios, había desarrollado operaciones muy eficientes entre recolectores y valorizadores. Con esto nos referimos a centros comerciales, colegios, sucursales, eventos, oficinas, entre otros establecimientos que con la nueva ley quedaron sin una normativa adecuada a sus realidades.
Estos establecimientos ya habían creado una cadena logística, en donde participan eficientemente recolectores y valorizadores y en donde es muy complejo establecer licitaciones estándar que cumplan con los requerimientos y servicios específicos de cada establecimiento.
La reputación corporativa y la respuesta a las expectativas de los grupos de interés son claves ya que influyen en los clientes, en la lealtad de los empleados, entre otras cosas. “Para fortalecer la reputación empresarial, una comunicación debe mantenerse accesible, pero más importante es que sea fiable, clara y pertinente”, subrayó Carolina Zúñiga, Gerente de Comunicaciones y Marketing de Kyklos.
Más grave aún, la nueva regulación vino a aplastar las operaciones ya existentes, empeorando el estándar y subvencionando una operación uniforme (no especialista) aumentando significativamente los costos de operación en estos segmentos de mercado (distorsionando los precios). *estadísticas de Reciclaje ANIR Kyklos 2023
La nueva Ley solamente “subvenciona” envases que pasaron por una “licitación” o “trato directo” de recolección de los SIG y no permite ninguna alternativa, incluso cuando los EyE domiciliarios son recolectados dentro del establecimiento sin utilizar el espacio público. Con esto, quedan automáticamente fuera, todas las formas de reciclaje, recuperación, segregación y valorización que no están establecidas por una licitación de un SIG. Por ende, todas estas formas de reciclaje, tampoco van al cumplimiento de metas y no reciben la “subvención” de la ley. (“plop! legislativo”)
Esto limita también a los SIGs, que en vez de tratar de recolectar volúmenes a través de operaciones ineficientes, podrían perfectamente “subvencionar” las operaciones eficientes que ya existen y fomentar la creación de más formas de recolección y valorización eficientes.
Por el contrario, para envases, embalajes y otros materiales industriales, se permitió seguir operando eficientemente, recolectando de manera específica, por especialistas y llevando a valorización a precio de mercado. En estos casos, se debe “informar” y “entregar” el volumen a cambio de una negociación entre el generador y el SIG (precio de mercado). A esto se le denominó “monitoring”.
Esta “camisa de fuerza” impuesta sobre los EyE domiciliarios ha provocado diversos impactos económicos y ambientales:
- Bajas tasas de recuperación en EyE domiciliarios. Muy poco impacto en la recuperación real, a pesar de la cantidad de inversión puesta. *estadísticas de Reciclaje ANIR Kyklos 2023
- Distorsión de precios de mercado.
- Exclusión y canibalización de empresas de recolección y recuperación especialistas que ya operaban de forma eficiente. El sistema fomenta la concentración de grandes empresas uniformes de recolección. Sin un aumento de tasas de recuperación efectiva.
- Bloqueo total a la innovación de sistemas alternativos de recuperación, reciclaje, upcycling y valorización.
La regulación es mejorable de manera sencilla, entregando flexibilidad a la industria de recuperación en los casos en que la segregación en origen y recolección se generan dentro de los establecimientos (sin uso del espacio público). A través del mismo mecanismo de “monitoring” que los EyE industriales. Esto genera competencia real, precios de mercado, innovación y valor agregado en la recuperación de EyE específicos, entre otras cosas. Y no genera ningún perjuicio sobre la recuperación de Domiciliarios del casa a casa, a través de las licitaciones ya normadas por la ley.
Esta mejora se puede realizar simplemente a través de una modificación en el Decreto 12 de la Ley, ampliando la posibilidad de “monitoring” a EyE domiciliarios mientras estos se gestionen dentro de los establecimientos en que se generan.
Esta mejora podría impulsar fuertemente una industria de recolección innovadora, ágil, canalizando el financiamiento hacia las soluciones eficientes, que logren recuperar a bajo costo, impulsando la creación de empleos, valor agregado, y logrando impactar de forma significativa en el aumento de las tasas de reciclaje.
Y para mejorar aún más la competitividad, la innovación y el crecimiento de un mercado de recuperación eficiente, la ley también debiera permitir mayor flexibilidad en la forma en que las empresas se agrupan en SIGs. Permitiendo a las empresas ser parte de más de un SIG, generando competencia y creación de SIGs especialistas a métodos de recolección en localidades diferentes. (¿Por qué debe ser el mismo SIG que recolecta en Aysén, que el que recolecta en Atacama?). No tiene ningún sentido práctico la centralización, cuando se supone que necesitamos descentralizar, sobre todo cuando en un país como Chile existen realidades totalmente diferentes en regiones diferentes del país.
Para terminar, no hay que nunca perder “el norte”, en que el objetivo final no es recolectar más para reciclar más, sino que disminuir la generación a través de muchos mecanismos (ecodiseño, retornabilidad, upcycling, entre otros) para disminuir los residuos que llegan a rellenos sanitarios. Y para lograr esto, es fundamental que los incentivos de la regulación estén bien alineados para que se desarrollen estas estrategias en conjunto a la recolección y reciclaje.
por Daniel Fajardo | May 14, 2025 | En los espacios públicos
- En total, el proyecto reutilizó aproximadamente 28.800 botellas, evitando que terminaran en el relleno sanitario y demostrando que la economía circular es posible y eficaz.
En el marco de una estrategia comunal orientada a fomentar la sustentabilidad y la educación ambiental, este lunes se realizó el lanzamiento oficial de 60 nuevos puntos limpios de reciclaje en la comuna de Colina. La iniciativa tiene como objetivo promover la cultura del reciclaje y sensibilizar a la comunidad educativa sobre la importancia de la economía circular.
El proyecto, liderado por la Dirección de Medio Ambiente en conjunto con la Dirección de Educación de la Corporación Municipal, contempló la adquisición de dichos puntos, fabricados en madera plástica reciclada. Estos estarán destinados a la recolección de papel, cartón, botellas plásticas y latas, contribuyendo así al manejo responsable de residuos desde una edad temprana.
Para la construcción de los puntos limpios modulares se emplearon 720 tablas plásticas, y cada una fue fabricada con 40 botellas plásticas recicladas. En total, el proyecto reutilizó aproximadamente 28.800 botellas, evitando que terminaran en el relleno sanitario y demostrando que la economía circular es posible y eficaz. Dieciocho de ellos se instalaron en establecimientos educacionales de la Corporación Municipal, siete en colegios subvencionados, uno en un establecimiento perteneciente a una fundación y dieciséis en instituciones educativas privadas. Además, cuatro jardines infantiles cuentan ahora con infraestructura para reciclaje. También se habilitaron puntos en espacios comunitarios clave, como el Parque San Miguel (dos unidades), la Biblioteca Municipal, Colina Emprende y la Dirección de Medio Ambiente.
El proyecto también refuerza el trabajo colaborativo con la Cooperativa de Reciclaje de la comuna, que, junto a la Dirección de Medio Ambiente, será responsable del retiro periódico de los materiales, los cuales serán trasladados a los puntos limpios municipales para su correcta disposición.
C