#YoNoBotoMiRopa: el desafío inspirado en el impactante cementerio textil del Desierto de Atacama
- Dar una nueva vida. Ese es el objetivo del desafío impulsado por una startup textil, que busca reducir la huella de carbono y ahorrar grandes cantidades de agua al reutilizar prendas de vestir en desuso.
Las impactantes imágenes del Cementerio Tóxico del Desierto de Atacama dieron la vuelta al mundo, y en esa línea, la startup Vestuá impulsó el desafío «#YoNoBotoMiRopa», el cual consiste en incentivar a las personas a sacar diez prendas de su clóset para darles una segunda vida.
“Cada acción, por pequeña que parezca, puede generar un impacto enorme si todos y
todas nos sumamos” comenta Joaquín Zavala, CEO de Vestuá. Reutilizar 10 prendas significa un ahorro de aprox. 20.000 litros de agua y 200 kg de CO2, junto a evitar que esa ropa termine como desecho textil, el cual toma muchísimos años en degradarse.
Este emprendimiento nace como una alternativa fácil y cómoda para poder reutilizar la ropa en el
año 2018. Su misión es darle una nueva vida a toda ropa, haciéndose cargo de todo el proceso de
retiro y venta con el objetivo que termine en las mejores manos (ya sea vendiendo o donando).
Hoy están trabajando junto a Paris, Komax y Ripley en campañas de sustentabilidad.
Hasta ahora han evitado contaminar 750 millones de litros de agua (30.000 piscinas llenas de
agua), 8.000 toneladas de C02 (lo mismo que sacar de circulación 640 millones de autos por un
día) y 180 toneladas de reciclaje textil (15.000 maletas llenas de ropa). Además, han realizado donaciones que se traducen en 300.000 prendas a distintas ONG.